Personal

La artista María Llopis se suma a este llanto: “Me ha pasado y ha sido pura maravilla. El gozo es tan intenso y la conexión con el universo tan brutal que lloras de felicidad. Qué tiempos aquellos, nena. Hace tiempo que no tengo tan buenos amantes. Creo que ese momento del orgasmo es el nirvana ese del que hablan. Yo lo habré experimentado dos o tres veces. Ahora solo tengo ojos para mi baby, que es un ser entre sexos”.

Llorar durante el orgasmo, por Gabriela Wiener.…

Estoy leyendo y ya casi acabando el libro de Clarissa Pinkola Estés, Mujeres que corren con los lobos. Y me ha dado ganas de volver a pintar. Y he dibujado esto con Roc medio dormido en brazos, mientras ambos despertábamos de la siesta. Le ha encantado, sobre todo las tetas y el bebé. La autora habla a través del relato de la importancia de la creatividad, que no es sino fruto de estar conectadas a nuestra parte instintiva y salvaje. Y he entendido que eso es lo que hace mi terapeuta en las sesiones. Me ayuda a conectar con mi instinto -el cual está enterrado debajo de una maraña que solo él sabe descifrar-.

Este libro me está ayudando mucho en esta parte de mi viaje, tres meses en un lugar frío e inhóspito. Una cárcel en la que yo misma me he metido por alguna razón que no soy capaz de ver ahora y que espero que no sea simplemente miedo. Tengo que cumplir condena durante todavía unas semanas más. Este libro me está llevando a casa antes de llegar a casa.…

He soñado con Roger Bernat. Vivía en una casa en el paraíso, que casualmente estaba a veinte minutos de donde estaba yo en mi sueño. El paraíso era una casa de piedra preciosa en las frías montañas desde la que se accedía a una playa de fina arena blanca y aguas calientes. Un extraño fenómeno climático. Yo de todas formas decía que muy bien, que muy bonito el paraíso, pero yo el mes que viene me vuelvo a mi casa en Benicassim, que ese es mi paraíso particular. Roger en mi sueño tenía dos hijos. En la realidad hace siglos que no le veo y le echo de menos. Se que es padre de un niño pero a lo mejor ha tenido otro. Roger Bernat es un director de teatro maravilloso.

Después de dos años de embarazo y lactancia sin menstruación, vuelvo a ser mujer cíclica. Hoy no sabía ni desempaquetar la compresa. La sangre me pilla trabajando como una loca en el libro de Maternidades Subversivas. Tengo unas entrevistas maravillosas, y las que me quedan.…