(scroll down for english)
Castellón, 2020
María Llopis
VER CATÁLOGO ONLINE (EN PDF) DE LA EXPOSICIÓN AQUÍ >>>
La pieza se presentó en forma de instalación en la Sala Sant Miquel de la Fundació Caixa Castelló. Se inauguró el 31 de enero de 2020 y la clausura iba a suceder a finales de marzo, pero la emergencia sanitaria Covid-19 obligó a cerrar la sala.
Se publicó un catálogo de la exposición en el que se puede recorrer cada una de las imágenes propuesta. El catálogo se acompañó de una serie de textos de diferentes pensadores y de la propia artista.
….
‘Un hombre aparece muerto’ es una serie de trece retratos de mujeres que tomaron las armas para defenderse de los hombres que las maltrataron y/o violaron, a ellas y/o a sus hijas e hijos. Se trata de un proyecto realizado a partir de imágenes tomadas de distintos medios periodísticos en la red.
….
El encabezado habitual de muchas noticias sobre víctimas de la violencia de género es ‘Una mujer aparece muerta’. Pero en algunas ocasiones podemos encontrar en la prensa casos de mujeres que se han defendido de forma activa de la violencia que se ejercía contra ellas y su familia. Con ‘Un hombre aparece muerto’ María Llopis busca dar visibilidad a esas mujeres que, habiendo transitado el lugar de la víctima, han optado por trascenderlo con mejor o peor fortuna.
En algunos casos actuaron en defensa propia, como Eva Analia de Jesús en Argentina, que evitó una violación correctiva por ser lesbiana. En otros se organizan de forma colectiva para luchar contra la violencia doméstica, como las Gulabi Gang en India, o las guerrilleras kurdas YPJ en Siria, que han conseguido liberar una parte del territorio que había sido ocupado por el ISIS instaurando una sociedad ecofeminista. Otros casos son vendettas, como la alemana Marianne Bachmeier, que disparó en el juicio al violador y asesino de su hija de seis años, la española María del Carmen García, que quemó vivo al violador de su hija de trece años, o la francesa Jaqueline Sauvage, que disparó contra su marido después de que su hijo se suicidara tras años de violencia. Otras cumplieron largas condenas en prisión por matar a su maltratador y violador, como Kim Dadou, que forma parte de una asociación estadounidense para que se aplique el eximente de defensa propia en dichos casos. Hay mujeres que defendieron a sus hijas, como las sudafricanas Gerda Jacoba Aletta Maritz, madre de la conocida actriz Charlize Theron, que mató al padre después de que este disparara tres veces contra ellas, o Nokubonga Qampi, apodada Mamá Leona por salvar a su hija de una violación múltiple. Otras veces fueron las hijas las que tuvieron que defenderse de un padre que las violaba y torturaba, como las hermanas Khachaturyan en Rusia. La argentina Paola Córdoba acuchilló junto a su hija al hombre -marido y padre- que intentaba matarlas. En España Gloria Chochi perdió la custodia de su hijo por la violencia a la que ambos estaban sometidos por parte del padre, a quien mató cuando intentaba forzar su vivienda pese a tener una orden de alejamiento. Otras perdieron su vida, como Reyhaneh Jabbari, que fue ahorcada en Irán por matar al hombre que intentó violarla. En la carta de despedida que escribió en la cárcel a su madre se puede leer:
“Querida Sholeh de tierno corazón, en el otro mundo seremos tú y yo quienes acusaremos y otros los que serán acusados. Veremos lo que Dios quiere.”
Agradecimientos: Pilar Dolz Mestre, Alfredo Llopico Muñoz, Alicia Murillo Ruiz y Alba Sotorra Clua, por no tener miedo.
Grabación artística del último mensaje de voz de Reyhaneh, por Loulou R. D. (Lama)
…
English version:
MAN FOUND DEAD
Castellón, 2020
María Llopis
“Man found dead” is a series of thirteen portraits of women who actively defended themselves against the men who mistreated and/or raped them and/or their children. The project is composed of images taken from various internet news sites.
The usual headline of news about victims of gender violence is “Woman found dead”. However, sometimes in the press we come across cases of women who have actively defended themselves against the violence that they and their families have suffered. In “Man found dead”, Maria Llopis aims to give visibility to these women who have, with more or less luck, decided to abandon the role of victim.
In some cases the women acted in self-defense, like Eva Analia de Jesús in Argentina, who escaped a corrective rape for being lesbian. In other cases they have organized themselves collectively to fight domestic violence, like the Gulabi Gang in India, or the YPJ Kurdish guerrillas in Syria who were able to liberate a territory that had been occupied by ISIS and establish an eco-feminist society.
Revenge is another motive, like the cases of the German woman Marianne Bachmeier, who shot the rapist and murderer of her six-year-old daughter during his trial; the Spaniard Maria del Carmen García, who burnt the rapist of her thirteen-year-old daughter alive; or Jacqueline Sauvage from France who shot her husband after her son was driven to suicide by years of violence. Long prison sentences were served by some, like Kim Dadou, for killing their abuser and rapist; she is now active in a North American association that campaigns for absolution due to legitimate defense in such cases.
There are women who defended their daughters, like the South Africans Gerda Jacoba Aletta Maritz, mother of the famous actress Charlize Theron, whose father she killed after he shot three times at them, or Nokubonga Qampi, known as Mama Leona, who saved her daughter from a gang rape. In other cases it was the daughters themselves who had to defend themselves from a father who raped and tortured them, like the Khachaturyan sisters in Russia. Paola Córdoba and her daughter in Argentina together knifed the man -husband and father- who tried to kill them. Gloria Chochi in Spain lost the custody of her child due to the violence which they both suffered from the child’s father; they killed him when he tried, despite having a restraining order, to force his way into their home. Others died, like Reyhaneh Jabbari, hung in Iran for killing the man who tried to rape her. In her farewell letter from prison to her mother she wrote:
“Dear soft-hearted Sholeh, in the other world, it is you and me who are the accusers and others who are the accused. Let’s see what God wants.”
Thanks to Pilar Dolz Mestre, Alfredo Llopico Muñoz, Alicia Murillo Ruiz and Alba Sotorra Clua, for not being afraid.
Artistic re-recording of Reyhaneh’s last voice message, made by Loulou R. D. (Lama)